BURGOS LIDERA LA CIFRA DE ACCIDENTES LABORALES GRAVES Y MORTALES EN CASTILLA Y LEÓN EN 2022

BURGOS LIDERA LA CIFRA DE ACCIDENTES LABORALES GRAVES Y MORTALES EN CASTILLA Y LEÓN EN 2022

Según los últimos datos facilitados por el Centro Regional de Seguridad y Salud de la Junta de Castilla y León, los accidentes de trabajo con baja en la provincia de Burgos en 2022 mantuvieron la tendencia al alza iniciada en 2020, situándose en unas cifras preocupantes y a niveles prepandémicos.

Aunque los accidentes leves se redujeron ligeramente (-2,5% respecto a 2021), las cifras de accidentes graves y mortales alcanzaron niveles alarmantes, incrementándose los primeros en un 115% (totalizando 50) y en un 11% los segundos, llegando a los 12 fallecimientos.

Estos datos sitúan a Burgos, lamentablemente, en el primer puesto del podio de nuestra Comunidad en cuanto a accidentes graves.

Analizando los datos en profundidad, observamos que los mayores índices de incidencia se dan en los sectores de Construcción (68) e Industria (47,7). Es especialmente preocupante la tendencia al alza en el primero, puesto que siendo un sector con altas expectativas de volumen de negocio y que continuará mejorando su progresión en los próximos años, las empresas del ámbito de construcción lo están haciendo con un notable déficit en el ámbito de la protección de la seguridad y salud de sus trabajadores.

También preocupa el incremento del índice de incidencia en el sector Agrario (1,6) en el que se ha producido un aumento de la siniestralidad del 5,29%, originándose un total de ocho accidentes graves y un accidente mortal en el último año. Aquí, son las condiciones de trabajo asociadas al manejo de maquinaria y herramientas agrícolas empleadas, la realización de esfuerzos físicos mantenidos o desproporcionados las que impactan y provocan la aparición de trastornos musculoesqueléticos derivados de las prácticas de trabajo. Además, la exposición a condiciones ambientales duras (mucho frío y mucho calor) y la falta de una formación adecuada, suficiente y específica del puesto de trabajo son las principales causas desencadenantes de los accidentes que hemos podido detectar.

Sin embargo, el mayor crecimiento en el número de accidentes graves se ha dado en el sector Servicios (128%) que registra además el 60% de los accidentes mortales en jornada de trabajo de la provincia, por detrás de Construcción (20%), Industria (10%) y sector agrario (10%).

Enfermedades profesionales

En cuanto a enfermedades profesionales (EP), durante 2022 se declararon 98, lo que supone un aumento del 30% respecto al 2021, un año atípico, en el que la declaración de enfermedades profesionales sufrió un llamativo descenso como consecuencia de del inicio de la tímida recuperación económica y de empleo tras la lenta salida de la crisis sanitaria de la COVID-19.

Muchas de las EP relacionadas con el trabajo tienen un origen multicausal y no exclusivamente vinculado al ámbito laboral, como es el caso de los cánceres y enfermedades cerebrovasculares, y por tanto no son consideradas como EP. Un ejemplo lo constituyen la ausencia de las patologías relacionadas con los riesgos psicosociales, que a pesar de que sí aparecen recogidas en el listado de la OIT desde el año 2010, permanecen ausentes del Listado Español de EP, actualización que venimos demandando desde UGT.

Consideraciones y valoraciones en cuanto a este dramático escenario

1º.- Hemos detectado algunos comportamientos más que discutibles de las Mutuas en relación a la concesión y mantenimiento de las bajas laborales, que parece que reservan únicamente para aquellos casos que revisten mayor gravedad. Así, observamos cómo se han incrementado notoriamente los accidentes sin baja.

2º.- Ahondando en la infraclasificación de los accidentes de trabajo, hemos visto que existe un problema a la hora de determinar la gravedad o no de un accidente, debido a la ausencia de elementos claros de determinación que quedan al criterio del médico de empresa o de las Mutuas y que, generalmente, se encuentran muy mediatizados por la aplicación de criterios economicistas, de búsqueda de baremos controlados respecto al absentismo laboral o, en el caso de empresas, que directamente pretenden eludir posibles actuaciones sancionadoras de importancia por parte de la Inspección de Trabajo.

3º.- La precariedad laboral mata. A pesar de los positivos efectos que ha desplegado la implantación de la reforma laboral, continúan existiendo nichos de enorme inseguridad e incertidumbre en el trabajo, temporalidad y parcialidad involuntaria que, claramente, impactan en la seguridad y salud en el trabajo de las personas trabajadoras.

Por ello, desde UGTCyL exigimos a las empresas de Burgos y a todas las empresas en nuestra Comunidad más y mejores medidas en materia de formación en prevención, que se refuercen los controles de vigilancia de la salud y la indispensable actuación de integración de la actividad preventiva en el sistema de gestión de la empresa. En definitiva, un mayor compromiso e implicación de las empresas en esta materia. Invertir en seguridad y salud es ganar.

Además, demandamos una mayor dotación de medios materiales y personales para la Inspección de Trabajo que permitan desarrollar en mejores condiciones su imprescindible actuación.

La Consejería de Empleo ha laminado el VI Acuerdo de PRL

 Y, finalmente, ante esta lacra de la siniestralidad laboral, constatar que las políticas de la Consejería de Empleo, instalada en la sinrazón, no contribuyen al consenso en esta materia tan fundamental. Han laminado el VI Acuerdo de PRL, acordado en el seno del Diálogo Social, en el que se recogía como una de las medidas importantes la participación de los agentes económicos y sociales en el desarrollo del Programa de Visitas y Asesoramiento a empresas y trabajadores. Un programa que ha venido siendo reforzado durante años y que de manera unilateral han borrado del mapa.

Las consecuencias tendrán, a futuro, un alcance de extrema gravedad.

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